La calidad del aire en ambientes interiores de edificios como hoteles, hostales y pensiones debe cumplir con niveles óptimos para garantizar la salubridad del espacio.
La contaminación de estos espacios representa riesgos y ocasiona problemas de diversa naturaleza (fatiga, molestias, asma, alergias, etc.) y es por ello que contar con un ambiente purificado es una característica esencial para un hotel.