El ozono es ideal para desinfectar superficies contaminadas por virus por lo que es una excelente herramienta para mantener espacios seguros y sin riesgos de enfermedades como.
La desinfección con ozono pude oxidar la pared celular de los microorganismos provocando su ruptura. Adicionalmente, el ozono causa daños a los constituyentes de los ácidos nucleicos (ADN y ARN) provocando una ruptura en los enlaces de carbono-nitrogeno, lo que causa despolimerización desactivando todo tipo de virus.